dijeron que Céline era un nazi
dijeron que Pound era un fascista
dijeron que Hamsun era un nazi y un fascista.
pusieron a Dostoievsky frente a un pelotón
de fusilamiento
y mataron a Lorca
le dieron electroshocks a Hemingway
(y vos sabés que se pegó un tiro)
y echaron a Villon de la ciudad (París)
y Mayakovsky
desilusionado con el régimen
y luego de una pelea de enamorados,
bueno,
también se pegó un tiro.
Chatterton se tomó veneno de ratas
y funcionó
y algunos dicen que Malcom Lowry se murió
ahogado en su propio vómito
borracho.
Crane se tiró a las hélices
del barco o a los tiburones.
El sol de Harry Crosby era negro.
Berryman prefirió el puente.
Plath no encendió el horno.
Séneca se cortó las muñecas en la
bañera (es la mejor manera:
en agua tibia)
Thomas y Behan se emborracharon
hasta morir y
hay muchos más.
¿y vos querés ser un
escritor?
es esa clase de guerra:
la creación mata,
muchos se vuelven locos,
algunos pierden el rumbo y
no lo pueden hacer
nunca más.
algunos pocos llegan a viejo.
algunos pocos hacen plata.
algunos se mueren de hambre (como Vallejo).
es esa clase de guerra:
bajas por todas partes.
está bien, adelante
hacelo
pero cuando te ataquen
por el lado que no ves
no me vengas con
remordimientos.
ahora me voy a fumar un cigarrillo
en la bañera
y luego me voy a ir a
dormir
Una ciudad es, desde luego, un producto, un objeto, pero ¿de qué índole? Ciertamente no es, solo, el resultado de una praxis social. La ciudad es un ámbito donde se advierte a lo o humano pues involucra una praxis que configura sentido, que ordena, que asimila, reparte a los hombres dentro de la ciudad concreta, es decir, dentro de un orden, que es la metonimia de una ciudad infinita, la cultura. (Juan Samuel Lopez Muñoz.)
martes, 14 de febrero de 2012
Manual de combate
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